Imagen del ojo de una mujer

Hoy queremos hablaros sobre los errores más habituales que comete la gente, y que en muchas ocasiones no son conscientes de ello, para que en caso de que sea vuestra situación podáis remediarlo.

No utilizar gafas de sol o hacerlo sólo a veces.

La radiación ultravioleta puede producir alteraciones como cataratas, pinguéculas, pterigiums, quemaduras en córnea etc y es por ellos que resulta necesario el uso de gafas de sol. Además, estos rayos UV tienen efecto acumulativo a lo largo de los años y por ellos es necesario utilizar las gafas convenientes a todas las edades y durante todo el año, no solo en verano. El sol está presente durante todo el año y nuestros ojos perciben de media 6.000 horas de luz anuales. Uno de los países pioneros en este tema y que están totalmente concienciados es Australia.

Imagen de un padre y su hija con gafas de sol

Dormir con la lentillas puestas.

Pese a existir lentillas especiales para dormir con ellas, por lo general, no lo son y como consecuencia puede hacer que la córnea no reciba un aporte de oxígeno suficiente y que aparezcan edemas y úlceras corneales. Otro riesgo de dormir con lentillas es la posible contaminación con algún tipo de bacteria o virus por no esterilizarlas diariamente cosa que es muy complicada que ocurra si se lleva a cabo un mantenimiento adecuado diariamente.

Tocar y frotar los ojos.

En cualquier caso frotarse los ojos es una fuente de problemas y aunque es malo independientemente de la fuerza que se ejerza es peor cuanta más fuerza se haga. A veces sentimos un picor ocular que nos resulta muy incomodo y deseamos frotar nuestros ojos para aliviarlo pero debemos intentar no hacerlo o en caso de hacerlo que sea de un modo muy suave y siempre con los parpados cerrados. Lo ideal para aliviar el picor sería aplicar una gota de lágrima artificial ya que por lo contrario si frotamos los ojos puede provocar una inflamación mucho mayor y expandirla en caso de que sea algo de tipo alérgico.

Imagen de un hombre frotandose los ojos

No realizar revisiones periódicas de la vista.

Muchas personas sólo acuden a realizarse revisiones cuando notan que ven muy mal o en caso de utilizar gafas porque se les rompen o deterioran. Ésto es un fallo muy grave que puede derivar en la no detección de otros problemas que no sean de graduación. Es por ello que os aconsejamos que realicéis un control preventivo mínimo una vez al año en el que se incluyan pruebas como por ejemplo tensión ocular, detección de alteraciones de problemas en retina etc.

Imagen de una mujer realizandose un analisis de la vista

Mirar pantallas de dispositivos electrónicos durante muchas horas.

El ser humano no está creado para llevar a cabo trabajos en visión próxima durante muchas horas y menos aún con dispositivos móviles como tablets o samrtphones. Estas acciones provocan una alta demanda de convergencia y acomodación y la fatiga aparecerá antes. Por la noche se debe utilizar siempre luz ambiental cuando se utilicen este tipo de dispositivos y no es recomendable ver a oscuras pantallas de televisión, ordenadores, tablets y teléfonos móviles.

Conducir sin gafas o hacerlo llevando una graduación incorrecta.

El 90% de la información que necesitamos al conducir la recibimos por la vista y por esta razón es tan importante que las personas con algún defecto refractivo tengan perfectamente graduadas su gafas y las utilicen para conducir. Lógicamente cuando se conduce con mal tiempo o de noche la necesidad de utilizarlas aumenta.

conducción nocturna

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